II JUEVES DE ADVIENTO

Pedir la Virtud de la Sabiduría

1-Peticion del día. Buscar las fuentes de Sabiduría Divina, inspirados por el Espíritu Santo, para que podamos distinguir más claramente los signos de los tiempos, para esperar oportunamente la venida del Señor. 2-Objetivo del día. Anunciaré la venida del Señor a mis hermanos, a como lo hizo San Juan Bautista, sin importar las voces que quieran acallar mi mensaje, las ideologías que quieren opacar la luz de la verdad, la luz de Cristo. 3-Para la meditación (Is 41,13-20; Mt 11,11-15) Es alentador oír, en estos días de Adviento, un fuerte y repetido mensaje de ánimo y aliento. En esto es precisamente en lo que creemos, si confiamos en la cercanía de Dios en la persona de su Hijo Jesucristo. Cuando la gente es pobre y vive afligida, Dios está cerca como su Salvador, es decir, Dios es alguien que está vinculado a ellos con lazos íntimos de afecto, y que con toda seguridad vendrá a asistirles. Los pobres son los que confían en él. Él les promete un nuevo paraíso. Aun los más pequeños en su reino son más grandes que el mayor y último de los profetas, San Juan el Bautista. 4-Oración Dios Todopoderoso y Eterno, Tú que te valiste de una creatura tuya, sencilla y humilde, como fue San Juan Bautista; para anunciar la venida de tu Hijo amado, permítenos llenar nuestro corazón de valentía y sabiduría, para anunciar constantemente la segunda venida gloriosa de Jesucristo, que acompañemos a los hermanos que sufren en esta espera, y que los animemos con ese Amor que solo tú nos puedes dar. Por Jesucristo nuestro Señor, Amén.